Pedro Paramo fue un hombre muy inteligente, que según el libro supo llevar a cabo sus planes con demasiada astucia, supo como controlar a las personas, pero sobre todo supo cambiar todo lo que le rodeaba. Privo de su libertad a muchas, pero muchas personas, al jugar con sus vidas tal y como lo hace un titiritero, que manipula y controla las acciones de su títere. No había autoridad más prepotente que Don Pedro Paramo. Supongo que en aquel tiempo las personas que conformaban el pueblo de Comala no conocían el concepto de “libertad”, esa palabra tan anhelada por todos, pero que gracias a Don Pedro, nunca pudieron gozar y disfrutar de ella.
Para mi la libertad no tiene precio, es un derecho del cual todos y todas podemos gozar, pero ¿Qué pasa cuando alguien nos priva de ella? Simple, somos victimas de aquellos que solo buscan utilizarnos para objetivos no tan buenos. Somos los únicos que podemos decir que hacer y que no hacer, es por ello que me sorprende que en esta historia el pueblo no se levantara en armas, y aboliera la represión que se estaba ejerciendo, claro que hubo algunos que hicieron su intento, pero ¿que hay de aquellos que solo vieron como su gente se desplomaba ante tanta injusticia?, la responsabilidad no solo recaía en los mas fuertes o los mas valientes, sino en todo aquel que estuviera arto de tanta violencia.
Las que sufrieron mas a causa de Pedro Paramo fueron sin duda las mujeres, que al ser manejadas como un objeto sexual, tuvieron que aguantar y cargar en su vientre el producto de la utilización y juego de tal cacique. Lamentablemente seguimos con este tipo de pensamiento machistas, donde el hombre sigue considerando a la mujer como un objeto que pueden manejar y dejar en el momento que ellos decidan, y esto no debe de ser así, aunque esta se muestre sumisa debemos tener respeto por ellas.
Somos una sociedad cambiante, ya no debe quedar ni rastro del trato que se les daba a las personas, y esta vez no solo me refiero a las mujeres, si no al hombre como especie, pero no podemos decir que de lo que hablo se refiera a una “utopía”, ya que tarde o temprano podemos llegar a ser una sociedad, donde el rico no se haga mas rico, y el pobre mas pobre. Donde se rompan las barreras en cuanto a creencias y pensamiento refiere. Se que esto se puede lograr, por muy difícil que parezca.
La peor forma de arreglar las diferencias es matando y eliminando al contrario, pues con esto solo logramos cavar nuestra propia tumba, dejando como recuerdo nuestro, un odio y desprecio, la vida da muchos giros y si esperamos tener un descanso en paz, y un lugar halla arriba debemos ser personas de bien, no jugar con los demás y respetar la integridad de cada uno de los que nos rodean, pues como vimos nuestra alma puede penar por el resto del tiempo y permanecer atrapados en un mundo donde ya no tenemos cupo, donde nuestro tiempo se agoto y donde nadie va poder ayudarnos.
Se que no tenemos el tiempo contado en esta tierra, pero mientras permanezcamos aquí debemos disfrutar al máximo de lo que nos da la vida, y afrontar las circunstancias para después no arrepentirnos por no haber hecho algo en contra de aquellos que solo vinieron al mundo para hacer daño. Yo soy dueño de mi propio destino y nadie puede determinar lo que pasa conmigo, solo yo decido si me someto, o no, solo yo decido si soy feliz o no. Toda esta en nosotros si queremos ser esclavos o dueños de nuestra propia vida…
Luis Alberto Reyes Sánchez NL: 35
No hay comentarios:
Publicar un comentario